El equipo de gobierno de Dénia (PP y
Centre Unificat) ya se ha convencido de que urge restaurar el castillo para
evitar que acabe convertido en una ruina. La edil de Cultura, Pepa Font, de CU,
llevó ayer a la junta de gobierno un programa de restauración de la fortaleza.
Las obras se llevarían a cabo entre 2012 y 2015 y persiguen "mejorar"
el monumento y "garantizar la conservación de su patrimonio
arquitectónico". Las actuaciones las define en un informe el jefe del área
de Arqueología y Patrimonio, Josep A. Gisbert. La primera sería la
reconstrucción de la escalera del Palau del Duc de Lerma, del siglo XVII, y la
rehabilitación de todo el área del Palau. Las obras del centro de recepción del
castillo han permitido recuperar más de veinte elementos arquitectónicos de esa
escalinata que ahora podrían reponerse en su lugar original.
Para estas obras de restauración, el ayuntamiento solicitará la asistencia técnica de la Dirección General de Patrimonio Artístico. Pero lo más peliagudo es su financiación. La junta de gobierno acordó ayer solicitar subvenciones al Gobierno central y a la Generalitat. Cuando los expertos de la conselleria de Cultura redacten los proyectos, el consistorio los presentará a las convocatorias de ayudas y pedirá el 1 % cultural del ministerio de Fomento.
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La segunda actuación prevista se centra en el baluarte occidental, que se halla en estado parcial de ruina. Se rehabilitaría la parte superior de la Torre Nord. Posteriormente, se restauraría el Palau del Governador y la Torre del Mig, que es de los siglos XI y XIV y está considerada como el monumento de más valor de la arquitectura de Al-Andalus en Dénia.
El origen del castillo se remonta a la época islámica. Empezó a construirse entre los siglos XI y XII. En época almohade, ya en el siglo XV, se levantaron la Torre Roja y la Torre del Consell. De los siglos XVI y XVII son los baluartes de estilo renacentista y el Palau del Governador.
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